Hoy, mi vida, necesito
oír tu voz melodiosa
diciendo que soy tu diosa…
susúrramelo bajito.
Dime un piropo bonito
porque me noto algo mustia
y no me gusta la angustia
que siento si tengo dudas.
Si tus sentimientos mudas…
¡sólo pensarlo me enmustia!
Por eso, ándate con ojo,
no mires a la vecina
que me pondré muy mohína
¡y ya verás si me enojo!
A la cabeza te arrojo
los platos de la vajilla
porque a mí nadie me humilla
y te quiero prevenir:
si te atreves a mentir
¡yo te daré la puntilla!
Jajaja, que buenas décimas, creo haberlas leído en el mono, monisimo con esa clienta, jajaja.
ResponderEliminarAhora en serio, me parece muy romántico y a la vez jocoso.
Me ha encantado leerlo otra vez.
Un besote amiga.
Ahora mismo he leído la bienvenida que haces, jajaja. ¡Qué graciosa eres!, pero te diré una cosa que ya sabrás de sobra. Quien no visita, no tiene visitas... Es una petardez, pero así es.
ResponderEliminarMira, en una ocasión fui a leer a alguien en un blog (que por cierto me encanta lo que escribe, que suele ser prosa, y es de lo más clara y moderna, digamos), le hice un comentario bastante curioso, y fue a mi blog y me dejo este comentario: hola. ¿Qué te parece? jajajaja. En fin...
Si es que no doy abasto con los foros, para encima visitar blogs... Y eso que hay muchos que me encantan, pero no tengo tiempo. tendría que dejar de trabajar y dedicarme a full time. Pero ¿de qué como?
EliminarUn abrazo.
¡Menudo cambio da el poema en la segunda estrofa!
ResponderEliminarHombre, el de internet me visita. Encantada estoy.
EliminarMuchas gracias.