Dadme albricias, amigos, lo he encontrado
tras semanas de búsqueda incesante;
agobiada, aburrida y anhelante,
me decidí por fin, ¿habré acertado?
Es un ático dúplex lo que he hallado:
una terraza atrás y otra delante,
muy amplio, luminoso y elegante,
casi como lo había imaginado.
Ahora lo que da miedo es la mudanza,
el caos se avecina, ¡qué jaleo!
me pondré a la faena sin tardanza:
a liar y empaquetar lo que poseo
con el ánimo lleno de esperanza:
¡Que sea para bien es mi deseo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario